Crear es algo que haces porque… ¿por qué? No lo sabes, ningún creativo lo sabe. Es una videollamada por Zoom que debes atender. No sabes de quién, no sabes de qué se trata ni por qué te llaman, pero tienes que atenderla. Quieres atenderla.

Cuando atiendes la llamada te llenas de energía. Del otro lado hay alguien mágico que sabe y te recuerda lo que quieres hacer, lo que te importa. Se abre un canal, un flujo que pasa por tí. Si no atiendes la llamada, si no escuchas y si no le das salida, el flujo se estanca. Si intentas que se vaya, el teléfono no deja de sonar y comienza a atormentarte. Si no te gusta lo que el flujo te trae o no lo aceptas, si intentas que el mensaje sea algo distinto de lo que es, se contamina. Y lo que se estanca o contamina actúa sobre tí como… algo estancado o contaminado.

Atiende la llamada y dale salida a ese flujo. Dedícale tiempo. Siéntate, juega con él, escucha lo que tiene para decirte. Vas a llenarte de energía. Vas a alinearte con lo que realmente tiene sentido para tí. Vas a poder utilizar esa energía para esa y otras cosas. Vas a ser más como tú eres. Y lo que salga de tí va a tener sentido, va a darte sentido.

No pretendas que sea lo que no es. Si el flujo tiene una canción romántica para tí no trates de convertirlo en tecno oscuro porque “eso es lo que quieres hacer”. Simplemente no estás escuchando. Estás concentrado en lo que pasa afuera y quieres copiarlo. Lo que hay afuera no viene de tí.

No conectes el flujo a resultados específicos. Que tu canción salga por un cierto sello discográfico, que hable de una cierta temática personal o política, que use sonidos y efectos de moda, que (no) tenga letra porque quieres música con/sin letra. Que tenga 1 millón de escuchas. Crea primero, déjalo ser lo que es. Cuando hayas terminado podrás pensar en qué sello discográfico lo recibiría, en cómo promocionarla y ver qué pasa si la gente resuena con ella. Pase lo que pase hacia afuera, no desconectes la llamada, sigue sintonizando el flujo y pasa a tu siguiente creación.

¿Y por qué? Porque si pretendes que sea lo que no es o buscas resultados específicos al crear vas a dejar de intentarlo. Vas a frustrarte, no vas a conectar con el flujo y no vas a poder utilizar su energía para que te de movimiento. Y se va a convertir en algo que “tienes” que hacer. Y se va a convertir en algo que dejas de hacer. Y se va a convertir en algo que te dices que haces pero no haces. En un proyecto “fantasma”. Ese del que hablas pero sobre el que no actúas y te hace sentir mal.

Conecta con el flujo, el universo, tu voz interior o como sea que te guste llamarlo. Dale salida, no quieras cambiarlo y disfruta de su energía.

“No hay mayor regalo que puedas dar o recibir que honrar tu llamada. Es la razón por la que viniste al mundo. Sólo así te sentirás realmente vivo.” Oprah Winfrey

ALEX TOMS

SM DE TUCUMÁN
21 DE FEBRERO DE 2023

No hay verdad en lo que lees en este artículo, sólo opiniones. Conclusiones y pensamientos sobre lo que observo. Toma lo que resuene. Descarta lo que no. Cuando algo te moleste, pregúntate por qué. No es importante que estés de acuerdo. Sí es importante que reflexiones sobre estos temas. Escucha tu voz y forja tu identidad creativa.